Es un técnico al que avala su trayectoria en el Cádiz, pero con cierta fama de distante entre los periodistas. En general, no es una persona cercana en el trato con los medios de comunicación y con parte del entorno cadista, y suele estar en el ojo del huracán, no sólo por los resultados de su equipo, sino por sus cambios en las alineaciones, sus manías y su, a veces, falta de mano izquierda con algunos jugadores. Sus razones tendrá ya que es el entrenador del Cádiz, manda en el vestuario y se merece el máximo respeto, aunque algunos discrepen con su labor.

 Por eso es inadmisible que, como nos cuentan y se apreció en Onda Cádiz TV, un periodista le haga una pregunta, tras un partido, y le dé la espalda. La educación de Cervera le hizo responder a quien demostró no tenerla por mucho carnet de periodista que le acredite. Y es que la educación está siempre por encima de todo. Ahí sí que le ganó Cervera y… el muchacho quedó ridiculizado.