El Cádiz jugará sus seis últimos partidos en el ‘Estadio Carranza’, durante los fines de semana
Todo un enigma cómo influirán los aspectos sicológicos, físicos y las lesiones en los equipos
Una mini Liga contrarreloj es la consecuencia que el ‘Coronavirus’ le ha dejado al Cádiz CF en ese camino, interrumpido, en busca de su ascenso a Primera y en el que vuelve a ponerse en marcha, tras una serie de fases de desescalada que han hecho que la realidad social, económica y deportiva de España estén muy cerca de entrar en esa esperada y necesaria normalidad.
Vuelve el fútbol de Segunda División y mantiene el mismo panorama que cuando cortó por lo sano el pasado 15 de marzo. Dos equipos (1º. Cádiz y 2º. Zaragoza) que mantienen intacta su condición de favoritos porque les llevan 6 y 5 puntos, respectivamente, a un pelotón de clubes (Almería, Huesca, Girona y Elche) que se postulan como los máximos aspirantes a disputar el play off de ascenso.
Pero si algo nos ha enseñado este virus es que nada se puede pronosticar y menos en el fútbol. Al Cádiz le esperan 11 partidos en un mes, un esfuerzo físico sin precedentes, lo que unido a que jugarán sin el apoyo presencial de su afición -todos los estadios estarán vacíos de publico-, lo que es otro factor sicológico, hace que la defensa del liderato sea un enigma que comenzará a resolverse muy pronto. Lo primero, ganarle al Rayo. No jugará el sancionado Cifuentes y David Gil (foto) será el portero. Suerte
Carlos Medina
@CarlosMedinaLap
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