Lo que realmente importa a la afición cadista es el equipo y sus resultados
La propiedad de las acciones del Cádiz CF SAD es una de las razones del conflicto
Digan lo que digan, si hubo razones deportivas para cesar a Juan Carlos Cordero
Se empató, jugando bien, en Albacete; se eliminó en la Copa al Tenerife y se perdió en Mallorca en un mal partido. El Cádiz logró en estas tres jornadas lejos de ‘Carranza’, los tres resultados posibles. Es lo que le importa a la afición: los resultados, ver ganar a su equipo; lo demás lo pone en segundo lugar. Por eso vencer al Alcorcón sería otro paso adelante y otro bálsamo.
Pero algo debe quedar claro. Después de 108 años (o los que sean) de historia, el Cádiz está por encima de todos y nadie debe y puede cuestionar su futuro. La afición sigue siendo su gran patrimonio, sin olvidar lo que influye la categoría en la que esté el equipo para sectores sociales de la ciudad; y lo que implica esto en sus parámetros económicos. Por ello se quiere ascender, lo antes posible, a Primera División.
El cese de Juan Carlos Cordero, como director deportivo, hizo saltar a parte del entorno cadista y algunos medios que, parece que sin documentación alguna, filtran informaciones falsas o hacen de la decisión un motivo para defenestrar a uno u otro. Parece que hay unanimidad en que el cese fue por motivos institucionales, por su relación con Pina.
Pues no. No estamos de acuerdo con ello, lo diga Vizcaíno, Cervera, Pina o el mismo Cordero. Hubo más y tiempo habrá de descubrir todas las razones de ese cese y publicarlas nosotros.
No, no fue por ser la mano derecha del murciano, por ser ‘hombre de Pina’, porque de ser así tendría que haber sido cesado el 1 de febrero, tras la detención del entonces consejero delegado. Lo mismo, si el motivo fuese que está imputado por la ‘Operación Líbero’, porque entonces Cordero debió ser echado cuando regresó, tras declarar en la Audiencia, ante el juez De la Mata, y estuvo días ‘sin estar’ y eso lo notaron todos los que estuvieron cerca de él.
Lo del contrato sí puede ser una de las razones, pero una de ellas, no la única Cordero se la jugó en aquella rueda de prensa del 16 de noviembre en la que sí intervino en la guerra aunque ahora diga que no. Sólo hay que repasar la hemeroteca o ejemplares de esta revista. Fácil. Entonces criticó y se enfrentó al presidente, igual que en otras declaraciones, incluso días antes de la detención de Pina.
Manuel Vizcaíno ha podido cometer dos errores; el primero, no decir a las claras las verdaderas razones de su decisión; y el segundo, no cesar a Cordero cuando el 1 de julio le rechazó su propuesta de contrato, muy parecido al de Pina, pero con importantes cambios. Y no, no fue sólo un cambio (como dijo Cordero en su rueda de prensa) entre el contrato firmado por Pina -pasándose por el forro al Consejo de Administración- y el de Vizcaíno, sino cuatro, como publicamos en estas páginas. ¿Qué no hay temas o razones deportivas? ¿Y ‘lo’ de Alvarito y las interferencias, filtraciones…? Que no decimos que sean cosas de Cordero, pero él era director deportivo y estaba obligado a ‘vigilar’ las operaciones. Y ¡lo de los dos chavales senegaleses que jugaron en el B y están lejos de aquí!, otro tema que puede traer más conflicto.
La lucha por la titularidad de las acciones del Cádiz CF SAD es una de las principales razones del conflicto Pina/Vizcaíno, aparte de un exceso de protagonismo, que le pierde a Pina, tras ser apartado por la ‘Operación Líbero’. Esa titularidad es una cuestión prioritaria para el presidente, principalmente saber de quién son realmente las acciones que compró Faly Fernández a Federico González y Chico Puig. ¿Pueden estar detrás el ínclito Vigueras o el mismo Pina?
En definitiva, sigue el conflicto pero, de todas formas, la afición lo que quiere son goles, victorias y puntos, que Óscar Arias acierte con los dos refuerzos que tienen que llegar y que pueden marcar la gestión del sustituto de Cordero, y que Cervera y los jugadores acierten en el campo. Así que, tiempo al tiempo.
Carlos Medina
Director